CUENTOS DEL AULA DEL 4TO B SEC: CONCURSO 2021

                                          CUENTO 4 

                    EL DESCONOCIDO DE LA LLUVIA 

En una noche lluviosa, se encontraban Natalia y Noah como de costumbre viendo Tv, la lluvia afuera impedía ver cualquier cosa a través de las ventanas… Había un ambiente frío, tenebroso y misterioso, algo poco usual para los chicos ya que tenían la costumbre de reunirse cada noche ya que la mamá de Natalia trabajaba viajando mucho y su padre había fallecido 6 meses atrás gracias a una enfermedad que obtuvo en las islas canarias en uno de sus tantos recorridos.

Los chicos estaban tan ensimismados buscando algo entretenido cuando de repente escucharon un gran estruendo en el jardín

¿Escuchaste eso?- preguntó Natalia a la vez que se levantó lo más rápido que pudo del sillón.

De seguro no es nada, Nat de seguro es un árbol por la tormenta- señaló el chico a su lado a modo de respuesta para tranquilizar a su amiga que ahora se encontraba caminando hacia la puerta que daba hacia el jardín.

No lo creo Noah, el jardín fue abandonado hace mucho, pero no creo que un árbol haga tal ruido. Deberíamos ir a ver-recomendó la chica que ahora se encontraba de puntillas tratando de ver a través del cristal, aunque gracias a la lluvia era imposible distinguir algo.

Antes solía venir mucho con mi padre, pero luego de su muerte mamá y yo abandonamos totalmente este lugar- pensó Natalia a la vez que abría la puerta.

Bueno, ya que esto te tranquilizará, vamos a ver el jardín- terminó aceptando Noah a la vez que tomaba unas linternas de un cajón de la cocina.

Al salir los chicos recibieron una gran oleada de aire helado y se vieron cubiertos por una total capa de oscuridad, siendo una escasa luz de linterna su única fuente de claridad para avanzar por el sendero del jardín.

A paso lento y poco seguro los chicos llegaron hasta el jardín que en algún momento fue muy hermoso, aunque ahora era solo hiedra y plantas secas.

¿ves? te dije que no había nada Nat, ahora si no queremos resfriarnos creo que deberíamos regresar a la casa- dijo Noah con un tono algo molesto ya que el clima afuera no era el óptimo, aunque detuvo su intento de reproche hacia su amiga cuando ambos escucharon un extraño ruido proveniente de unos arboles del jardin.

¿decias? es claro que hay algo…-comunico Natalia a la vez que se giraba para tratar de localizar la fuente de este ruido

¿o alguien? -añadió Noah a modo de broma para asustar a su amiga por su gran paranoia.

¡no digas eso, Noah!- le reclamó su amiga a la vez que se acercaban hacia un montón de hojas secas, la aparente fuente del extraño ruido.

De seguro fue un animal, relájate Nat - trato de “relajar” el ambiente su amigo, aunque por dentro también le estaba empezando a crecer un muy mal presentimiento.

Poco a poco se iban acercando hacia el montón de hojas secas, aunque cada vez se aproximaban más, lograron confirmar que su terror debía ser real y de acción inmediata.

¡Es sangre! - gritó Natalia al ver que se podía ver un charco de sangre alrededor de las hojas secas .

No puede ser posible, Natalia nos debemos estar imaginando todo esto ¿Cómo podría llegar un charco de sangre a tu jardín?- dijo Noah a la vez que agitaba su cabeza en señal de negación, era mucho más fácil negarse a la imagen que tenían en frente y no buscar algo lógico, ya que lo lógico sería que estaban en total peligro.

¿Por qué te cuesta tanto aceptar que hay sangre frente a nosotros? no me lo estoy inventando, Noah algo o alguien está herido cerca de nosotros, debemos revisar - le señaló su amiga a la vez que se giraba tratando de buscar la fuente de toda esa sangre, esperando que fuera un animal herido por la tormenta.

Si, Natalia, si encontramos lo que produjo la sangre también podríamos encontrar la causa y la próxima fuente de sangre podríamos ser nosotros- le señaló su amigo en una fallida misión de hacer a su amiga entrar en razón.

la inminente pelea de los dos amigos se vio interrumpida al ver que el montón de hojas se acababa de mover.

¿Viste? Debe de haber un animal herido, Noah ayúdame a ver- exclamó Natalia a la vez que se iba acercando a el montón de hojas que ahora hacía ruido, aparentes quejas de dolor.

Aunque a penas eliminaron el espacio restante entre ellos y el montón de hojas, lograron ver que había una persona herida en este.

Noah, Es un chico como de nuestra edad, se ve muy herido, debemos ayudarlo- le señaló su amiga a la vez que trataba de examinar de donde había brotado tanta sangre

Claro, ¡también podríamos hacerle un café!- le gritó su amigo a la vez que la tomaba del brazo para alejarla del chico que ahora los miraba con ¿miedo?-  en definitiva te has vuelto loca, no sabemos quien es, pero si algo tengo en claro es que las personas normales no andamos cubiertos de sangre en jardines- le recordó su amigo ante la gran inminencia de una terrible idea maquinándose en la cabeza de su amiga.

oh por dios, Noah, es un chico y está herido, debemos llamar a la poli…- la chica se vio interrumpida antes un gran ¡no! de parte del chico desconocido que rápidamente se había levantado

¿ves? las personas normales llamamos a la policía ¿estás segura de lo que haces?- señaló su amigo a la vez que observaba como el chico se tambaleaba, probablemente por la pérdida de sangre.

No me importa, Noah has silencio o ayúdame a llevarlo a la casa, allí debe haber un botiquín- le señaló a modo de orden Natalia a su amigo que ahora se encontraba ayudándole a cargar a un total desconocido a su casa, aunque obviamente ambos sabían que no era una buena idea.

Al entrar los tres tomaron vasos de agua para pensar con claridad que hacer, aunque se vieron interrumpidos ya que las luces de toda la casa empezaron a parpadear

iré a ver los fusibles mientras tu buscas el botiquín y asi terminamos esto lo más rápido posible- dijo Noah a la vez que abandonaba la habitación y se encaminaba hacia solucionar el aparente problema de electricidad.

Luego de unos 25 minutos ambos chicos estaban de nuevo en su sala terminando sus vasos de agua mientras observaban cómo el chico rápidamente vendaba una herida en su abdomen

voy a encender el televisor para alivianar el ambiente- anunció Noah a la vez que dejaba la pantalla en el canal de noticias, cuando algo llamó mucho su atención

“Joven de 24 años de edad escapa del Manicomio “Las rosas” es altamente peligroso, cualquier información llame a las autoridades”

Ambos chicos palidecieron ante la idea de que el joven frente a ellos fuese el sospechoso que la Tv señalaba, aunque el joven ni se inmuto, no había dicho ni palabra desde su agresivo “no”, cuando los chicos estaban a punto de tomar el teléfono vieron como el chico se removía en el asiento como si tratara de buscar algo- Un arma- pasó por la mente de los chicos ahora aterrados, aunque se tranquilizaron al ver que era una hoja

Buscar- fue lo único que salió de la boca del joven a la vez que extendía la hoja hacia Natalia, la cual quedó en total shock al ver que era una foto de su difunto padre

Joven, No lo puede “buscar” él era mi padre, falleció hace 6 meses - le señaló Natalia, aunque ella aún seguía en un estado de shock al ver que este “desconocido “conoció a su padre de alguna forma.

De repente las luces volvieron a fallar, dejando todo en una total oscuridad, un rayo hizo una sombra extraña, de repente todo ocurrió tan rápido que no dio tiempo de reaccionar ¡Había alguien más en la sala!

Las luces se encendieron dejando ver a otro Joven, pálido y delgado, lucía un traje blanco que en partes tenía manchas de sangre “es nuestro fin” pensaron los tres jóvenes que ahora observaban a la verdadera causa de miedo.

Después solo oscuridad… “los vasos de agua” fue lo último que pasó por la mente de los jóvenes…

                                                                                                               LA DESCONOCIDA