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lunes, 14 de septiembre de 2020

CUENTOS DEL AULA 5TO B DE SECUNDARIA

 

NUESTRO ESCONDITE SECRETO:

Shuuuuu... Una niña duerme, se llama Jane. Aunque llegó a este mundo casi al mismo tiempo que la primavera la recibió un frío muy inusual, una gran sensación de soledad y tristeza que recorría los pasillos de todos los hospitales, sólo recuperó el calor al llegar a su casa y a su cuna, en los brazos de sus padres primerizos y asustados. Jane aprende a respirar mientras sus papás aprenden a contener la respiración y perder el Miedo día tras día, porque todos son novatos en ser padres: uno nunca ha sido niño y otros nunca han sido padres. Padres primerizos. De haber nacido un mes antes, habría demasiadas risas, abuelos expertos, primos molestosos, ruidosos  y tal vez un rock de fondo, pero Jane nació cuando los besos y abrazos están en cuarentena, las puertas cerradas y un silencio raro invade todo. La vida se ha lentificado justo cuando le toca vivirla.

Querida Jane, no te asustes, esto es un juego que papá y mamá inventaron y te ayudarán a ganar. Se llama "el escondite" y participamos todos, unos desde nuestras casas y otros desde sus trabajos, el juego consiste en ocultarse para que no nos encuentre un monstruo diminuto, verde e invisible que se estira y estira, cruzando fronteras mientras nosotros permanecemos inmóviles, sin movernos ni un poquito, sólo aprovechamos a las ocho de la noche cuando el monstruo se distrae y corremos para salir a la ventana y aplaudir a los guerreros que luchan frente a ese virus Cara a cara y día a día. Cada uno combate con sus armas: hay batas y termómetros, micrófonos, camiones, ambulancias y mercados llenos de alimentos, teléfonos, Pizarras, plumones y escobas... Incluso para los adultos es difícil superar niveles de este macabro juego porque el virus es escurridizo y cobarde, pero tranquilo, ya estamos avanzando y entre todos conseguiremos darle golpes, entonces te sacarán del escondite y conocerás el mundo de verdad, en el que la gente corre y ríe, besa, madruga para ir a sus trabajos y se reúne por las tardes con sus familias o amigos con un café o una cerveza para no celebrar nada o celebrarlo todo, simplemente para estar cerca.

 

Tú no temas, estás a salvo en la morada donde llevas nueve meses, sólo has cruzado al otro lado de la piel que ya conoces, déjate engreír en el calor del pecho de mamá y la gran sonrisa de papá, aunque no la tenga siempre o no le sale entera porque tiene la cabeza repleta de temores que tú ahora no los entiendes, que nadie entiende, en realidad. Ahora, que se han detenido relojes, hogares, trabajos, estudios, calendarios y planes ellos tienen un motivo para levantarse, un horario, un motor y motivo, tú eres su fuerza, y tienes que ayudarlos porque en su interior se están librando mil batallas, sensaciones intensas, miedos y contradictorias, motivos por los que tienen que seguir y sucesos que son  dignos de olvidar, pero esos seguro que los leerás en los libros de historia cuando vayas al colegio.

De momento escucha cuentos, juega, ríe, descubre y disfruta el olor de la piel y el sabor de la leche y mantén esos lindos ojitos borrosos unos días más, danos tiempo para recuperar los colores y la música, los fuegos artificiales, los globos, las risas, los abrazos y los besos. Te prometo que existe un universo infinito lleno de familia y amigos deseando conocerte que se están controlando para no derribar puertas y romper normas, conformándose con verte crecer a través de pantallas de cristal, con tan solo verte por fotos o video llamadas que tanto nos alejan en nuestro día a día y tanto nos facilita y acercan cuando jugamos "al escondite".

  Anónimo




UN VIRUS MORTAL

En la ciudad de Buran, China contaban los rumores sobre un animal que tenía los poderes para volverte inmortal. Estos animales podían volar caminar, pero no ver. Fueron nombrados como murciélagos. Cuentan por ahí que unos científicos japoneses curiosos de ese rumor fueron hasta China a experimentar con aquel animal, ellos harían esa investigación para el estado japonés, eran tres las personas que querían saber más sobre cómo y que tenía este animal para que sea tan famoso.

Al llegar a la capital de China, ellos emprendieron su búsqueda. Llegaron a un hotel y descansaron del largo viaje. Al día siguiente los tres científicos viajaron a Buran en tren. Al llegar a su destino los científicos empezaron a indagar sobre este misterioso animal, preguntaron a señores, niños, mujeres personas que vivían alrededor de la ciudad, sin embargo, nadie supo decir donde se encontraban, solo era un rumor decían, pero los científicos siguieron y siguieron preguntando. Hasta que después de tanto caminar, ellos dicen que fueron a una tienda para comprar unos refrescos y descansar un poco. Un anciano los atiende amablemente. Uno de los científicos cuestiona al anciano si sabía algo de donde se encontraban los murciélagos, a lo que el abuelo respondió: “Estos animales viven en unas cuevas dentro del bosque”. Los científicos al escuchar esto se fueron rápidamente a buscar estas cuevas.

Ellos caminaron demasiado buscando la cueva. Cuando de pronto avistan unas cavernas oscuras y ellos rápidamente se adentran en ellas. Pasaron las horas ahí dentro, hasta que observan una especie de animal negro volando y se dan cuenta de que encontraron un murciélago. Agarraron sus cosas y empezaron a estudiarlo, pudieron encontrar varios de ellos de diferentes colores y tamaños, encontraron huevos y murciélagos recién nacidos. Los científicos se pasaron mucho tiempo ahí y tenían la necesidad de descansar, sin embargo, se dieron la sorpresa que el camino para la salida era un laberinto. Ellos pasaron la noche en la caverna sin poder salir, su alimento era escaso, pasaban más los días y no sabían que comer, el hambre, el cansancio, la frustración de no poder salir los devoraba.

Tanto fue el hambre que decidieron comerse murciélagos crudos. Ellos los despedazaron, los chancaron con piedra y luego se los comieron. Eso calmo su hambre y pudieron continuar buscando la salida. A los tres días se sentían muy cansados y con dolores de cabeza y garganta cada día se sentían peor. Hasta que llego el día 14 al fin, después de tanto encontraron la salida de las cavernas, pero se sentían muy mal. Acudieron en ómnibus al hospital más cercano, en el trayecto los tres científicos tosían demasiado, pero a su llegada al hospital murieron a las afueras. Personal médico recogió los cadáveres y esto fue informado a el estado japonés.

Desde aquel acontecimiento pasaron solo 1 mes cuando aquella tos que tuvieron los científicos, era un virus mortal, COVID 19, que lo contrajeron, y que se había esparcido por todo el país de China.

Este país se quedó en silencio sobre lo que pasaba y no hicieron nada al respecto, tanto fue el contagio que más de la mitad de la población china se había contagiado de este virus. Después se empezó a escuchar casos del COVID 19 en Italia, España y por toda Europa, esto era una pandemia masiva que no tenía cura y estaba arrasando con todo el planeta. Solo paso 3 meses para que todo el mundo este infestado de este virus, las personas morían diariamente, los infectados se triplicaban a cada hora, los hospitales colapsaban, doctores había pocos porque también ellos se contagiaban, el alimento no llegaba a todas las familias del mundo, las personas se descontrolaban, se frustraban, se mataban entre ellos solo por comida mientras tanto las cifras aumentaban y aumentaban.

Todo eso parecía una película sacada de ciencia ficción. Esto llego a un punto donde millones y millones de personas murieron, solo algunos jóvenes y adultos pudieron sobrevivir. La Tierra era inhabitable, el COVID 19 evolucionó a un estado tan letal que con solo respirar el aire tú ya estabas contagiado y tu muerte seria a los pocos minutos.

Varios años han pasado desde que algunos de nosotros, sobrevivientes, fuimos llevados al espacio en esta gran nave con el fin de preservar nuestra especie. Esta historia nos cuenta tanto que pareciera que la Tierra nunca haiga existido y solo sea un mito, como saber si aún habrá personas viviendo ahí o simplemente todo ya desapareció y que nunca volvamos a nuestro hogar. Solo somos sobrevivientes con la esperanza de algún volver.

Ahora nosotros reflexionamos sobre lo mal que hacíamos al ser egoístas con nosotros mismos, al no apoyarnos en los momentos más difíciles. Tal vez si nos hubiéramos unido, este virus no nos hubiera ganado la batalla.

                                                                                                              

CORONAVIRUS



  Una esperanza en la pandemia

El día que todo comenzó era un día normal muy tranquilo, me estaba alistando para ir al colegio, terminé de desayunar y me fui caminando al colegio, en el colegio mi profesora nos comenzó a contra sobre el COVID-19 esta enfermedad que se había esparcido por todo el mundo y que estaba matando a miles de personas, realmente no tomamos mucha importancia porque la enfermedad estaba en otros países.

En la tarde fui a mis clases de piano estaba todo tranquilo hasta que una de mis amigas Lucia empezó a toser nos dijo que solo tenia gripe, le dimos un “Panadol” para que se le pasara, pero la pastilla no le ayudó en nada, seguía tosiendo y más fuerte hasta llego a tener dificultades para respirar, el profesor nos dijo que la llevaría al hospital y todos teníamos que volver a nuestras casas. Al día siguiente los padres de Lucía vinieron a mi casa a preguntarme si Lucia estaba conmigo y yo les conté sobre lo sucedido con Lucia en el salón de clases y que el profesor nos dijo que la llevaría al hospital, ellos fueron a la policía a denunciar al profesor por un posible secuestro yaqué no la encontraron en los hospitales. Y en la tarde intente comunicarme con Jackelin mi mejor amiga de la clase de piano pero no me contestaba y me parecía muy raro ya que ella siempre estaba pendiente del celular no le tome mucha importancia, fui a la sala y mis padres estaban hablando por celular hasta que me vieron y apagaron su celular y yo sorprendida por su reacción le pregunte que pasaba y ellos me dijeron que todos mis compañeros de clases de piano  desaparecieron y que de seguro tenía relación con mi profesor.

Ese día no pude dormir sabiendo que todos mis amigos, que mi mejor amiga desapareció y no saber si estaba viva o muerta me dolía. No pude evitar recordarla a ella que siempre paraba con una sonrisa y cada vez que reía hacia un ruido como Bob esponja y siempre la molestaba con eso, no pude evitar llorar, saber que ya no podría verla me dolía bastante. Mis   padres no querían que asista al colegio por miedo que me pase lo mismo que a mis amigos. Al día siguiente mis padres fueron a trabajar y me dejaron con mi hermano mayor, el salió a comprar una película asique yo llame para comprar una pizza y después de 5 minutos sonó el timbre. Me dirigí hacia la puerta con dinero pensando que era Luke el repartidor, pero no era él, era un hombre alto, tez blanca, cabello castaño y tenía un traje negro, me agarro y puso un trapo en mi nariz y después me quede dormida.

Cuando desperté estaba en un cuarto pequeño, solo tenía una cama y una puerta de metal y al costado  una ventana grande de color negro que no podía ni ver ni abrir , grite pidiendo ayuda aunque sabia que nadie me escucharía o ayudaría, rendida me tire a la cama tenia sed y hambre, pensando en Jackelin y lucia que de seguro también deberían estar aquí aunque no entendería por qué a nosotros, no hacíamos mal a nadie es mas todos los domingos íbamos a los asilos a ayudar a los ancianos, seguía metida en mis pensamientos hasta  que vi a un mujer con una bandeja de comida y un vaso de agua, estaba sorprendida aunque un poco aliviada al saber que no era mi profesor el que me había secuestrado, ella tenía rasgos asiáticos, su tez clara, sus ojos eran de color azul y era alta,  me di cuenta que no me dejaba de mirarme, le pregunte en donde estoy pero ella no me decía nada llegue a pensar que no hablaba mi idioma hasta que me dijo que era interesante y que tenía mucha suerte, yo aun me sentía mas confundida, ella me dijo que la siguiera, yo sin dudar la seguí y pude ver que la ventana del cuarto se podía ver desde afuera , caminando por el pasillo me di cuenta que habían muchas puertas y en una de las ventanas pude ver a mi profesor echado boca abajo conectado a una máquina, sentí como una lagrima caia por mis mejillas y ella me dijo que todos en mi salón tenían el  COVID-19 y que los trajeron aquí sin que nadie lo supiera para que las personas no se asustaran con esta enfermedad y que mañana recién se les informara a nuestros padres y saldrá en las noticias, yo le pregunte por que recién ahora, ella me miro y me dijo porque tu no tienes el COVID-19, te hicimos pruebas y salieron negativo suena imposible porque en mi país (China) todas las personas se siguen contagiando y muriendo pero tú que deberías estar acostada en una de las camas, estas aquí hablando conmigo normal, tu podrías salvar a todos tus amigos y a muchas personas, solo tienes que quedarte y acertar que te hagamos mas pruebas, yo acepte sin dudarlo si era para salvar a mi mejor amiga, amigos y más personas.

Después de estar 3 meses en pruebas me sentía muy débil, pero un mes después pude volver con mi familia, y mi mejor amiga y amigos pudieron volver con sus familiares. Estoy muy segura que jamás olvidaremos que pudimos vencer al COVID-19.

Lumière et espoir 

 

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