El
Enigma de los vecinos enemistados
En
un tranquilo barrio, donde las casas se alineaban perfectamente y todo parecía
estar en armonía. Sin embargo, bajo en esa apariencia tranquila, se presentaba
una rivalidad despiadada entre dos vecinos: Don Ernesto y Doña Rosalinda.
La
primera pelea comenzó por una disputa sobre el ruido. Don Ernesto, un hombre
mayor y cascarrabias, no soportaba el constante sonido de la música. Sin
embrago, ella se negó rotundamente, argumentando que tenía derecho a disfrutar
de su tiempo libre como quisiera.
A
partir de ese momento, la amabilidad dio paso a la guerra entre ambos vecinos.
Don Ernesto comenzó a poner música clásica a todo volumen en su patio trasero
cada vez que Doña Rosalinda intentaba descansar. Por otro lado, ella respondía
con fiestas ruidosa hasta altas horas de la noche.
La
tensión aumentaba día a día, y los vecinos del barrio se dividieron en dos
bandos: aquellos que apoyaban a Don Ernesto y sus reclamos por paz y
tranquilidad, y aquellos que respaldaban a Doña Rosalinda y su derecho a
divertirse en su propio hogar.
La
situación empeoró cuando la pelea se extendió más allá del ruido. Ambos vecinos
comenzaron a competir por tener el césped más verde y las flores más hermosas,
utilizando fertilizantes y pesticidas en exceso, lo que afectó la salud de otros
jardines cercanos.
La
rivalidad se hizo famosa en el barrio e incluso se crearon apuestas sobre quién
ganaría esta absurda guerra vecinal. Los niños del barrio disfrutaban del
espectáculo, pero los adultos estaban cansados de tanto conflicto.
Un
día, cansados de la situación, los vecinos decidieron intervenir. Organizaron
una reunión de mediación en la que se les recordó a Don Ernesto y Doña
Rosalinda que vivían en una comunidad y que debían encontrar una solución
pacífica.
Después
de una larga discusión, ambos vecinos finalmente llegaron a un acuerdo.
Acordaron establecer horarios específicos para la música y las fiestas,
respetando el descanso del otro. También se comprometieron a cuidar sus
jardines sin afectar a los demás. Con el tiempo, Don Ernesto y Doña Rosalinda
aprendieron a convivir en armonía. Descubrieron que tenían más cosas en común
de lo que imaginaban y comenzaron a compartir conversaciones amistosas en lugar
de peleas constantes.
El
barrio volvió a ser tranquilo y pacífico, y los vecinos aprendieron la
importancia de la comunicación y el respeto mutuo. La historia de las peleas de
vecinos se convirtió en una lección para todos, recordándoles que la
convivencia armoniosa es fundamental para construir una buena comunidad unida.
MAX
INFLUENCIA
Inclusive ser una de las alumnas más
destacadas del salón, no evitaría que fueras por el mal camino y eso lo
entendió muy bien Valeria. Ella vivía en Sta. Clara, estudiaba en la escuela
“X” y durante casi toda su etapa escolar, ocupó los primeros puestos y era el
orgullo del colegio.
Ya estaba en su último año, estaba a
nada de finalizar el colegio y ya había preparado con antelación que es lo que
quería hacer en su futuro, se había planteado metas y estaba segura en que las
cumpliría, además, tenía el apoyo de sus padres y los profesores que la estaban
alentando día tras día, ella realmente era muy afortunada.
-Último año… He visto a varias
promociones llorar en el último día y no puedo evitar preguntarme si también
haré lo mismo…
Un nuevo día, ya había llegado al
colegio y se dirigió a su respectivo salón, como era usual, fue la primera en
llegar, se sentó en su pupitre y esperó pacientemente a que llegarán sus demás
compañeros a quienes saludaba. Luego de un largo rato, ya estaban todos, excepto
su profesor, quien se estaba demorando en entrar.
- ¿Será que el profe faltó?
-Ojalá y sí, porque no hice la tarea…
- ¿Había tarea? ¿Cuándo la dejaron? No
sabía que había…
- Nunca sabes nada, no es novedad.
Varios conversaban entre sí, hasta que la
puerta fue abierta y rápidamente se levantaron de sus asientos para saludar a
su profesor quién pasaba atrás suyo con un alumno nuevo, no paso mucho para que
varios susurros comenzaran a escucharse y con una seña del profesor, todos
quedaron callados.
-Buen día chicos, hoy ha venido un nuevo
alumno, que compartirá este último año con nosotros, adelante, preséntate.
-Mi nombre es Lucas… Un gusto
conocerlos.
-Un gusto conocerte Lucas, puedes
sentarte en el pupitre libre y comenzaremos la clase. Abran la página 15 del
libro de Historia. Quiero que se lean desde esa página hasta la número 18.
Lucas en silencio fue asentarse en el
asiento de adelante que se encontraba frente a la mesa del profesor y al lado
de Valeria, quién en silencio ya estaba leyendo las páginas que había indicado
el profesor. Pasaron las horas y ya había llegado el horario del recreo, la
gran mayoría salieron disparados del salón y otros se habían quedado para
acercarse a Lucas.
“¿De dónde venías? ¿Dónde estudiabas?
¿Te gusta el futbol?” Y así y muchas más preguntas le hicieron, Lucas con
paciencia respondía cada una de ellas y ya había entablado diversos temas de
conversación.
- ¿Cuál fue el motivo por el cual
llegaste acá?
- Por el trabajo de mis padres.
Pasó un tiempo, durante los primeros
días ni Valeria ni Lucas habían intercambiado palabras, pero debido a algunas
actividades que se tenían que realizar de forma grupal o en dúo, terminaron por
volverse cercanos, algo que sorprendía a los que conocían a Valeria, ya que
solía guardar una sutil distancia con los demás. Así que, sin darse cuenta
Valeria, comenzó a percibir sentimientos que nunca habían llamado su atención,
poco a poco, Valeria comenzó a soltarse más y más, de lo que antes llegaba
temprano al colegio, comenzó a llegar tarde por ir acompañada de Lucas, las
veces que se le olvidaba de presentar las tareas, era debido a que un día
anterior se encontraba paseando por la plaza hasta las altas horas de la noche.
Sus padres de Valeria estaban al
principio aliviados de que su hija comenzara a salir, pero al ver las faltas
seguidas que comenzaba a tener por olvidarse de presentar las tareas,
decidieron intervenir, intentaron hablar con su hija, pero la única respuesta
que obtuvieron fue un portazo, sorprendiendo a ambos padres.
Ya habían pasado varios meses desde la
llegada de Lucas, durante todo ese tiempo las personas que habían conocido a
Valeria durante mucho tiempo estaban sorprendidos por el cambio que había
surgido en ella, intentaron conversar, pero ninguna de las palabras dichas
causaba un efecto, entonces se dieron cuenta que la Valeria que habían
conocido, probablemente ya no estaba.
- ¿No disfrutas esto? Esta libertad, sin
presión ni expectativas de los demás depositados en ti… ¿No te sientes bien
siendo libre?
- ¡Claro que sí! Pero… recuerdo que
tenía metas y…
- Si vas a dudar de esto, entonces
podrías volver, pero eso implicaría no volver a hablarnos.
- ¡Claro que no! ¡Está bien así! Gracias
a ti… Yo… - Valeria se quedó en silencio unos segundos. – Pude conocer un lado que
no conocía. Gracias Lucas, eres un muy buen amigo.
- Me consideras un “muy buen amigo”,
¿eh?... Ven, conmigo, te mostraré un mundo increíble. Mañana faltemos al
colegio.
Dicho eso, al día siguiente Valeria
fingió que se dirigía al colegio, pero se dirigía al punto de encuentro donde
había quedado con Lucas, una vez llegó, este último ya se encontraba
esperándola, sin decir mucho comenzaron a caminar por las calles, inclusive se
subieron a un taxi, donde Valeria perdería el conocimiento a mitad del camino y
cuando se despertó no sabía donde se encontraba. Una habitación parecida a la
de un hotel, cuando intentó moverse se dio cuenta de que estaba atada a la cama
y no podía gritar ni pedir ayuda ya que tenía una mordaza en la boca, muchos
sentimientos invadieron a Valeria en ese momento, y el que predominaba más, era
el arrepentimiento.
-Ah, parece que ya despertaste, ¿sabes?
Nunca debes de confiar en una persona fácilmente, nunca sabrás si es hijo de
una mafia que prostituye a adolescentes. Pero, después de todo, sí avisé, ¿te acuerdas?
Lucas se levantó del sillón y caminó
hacia la puerta de la habitación, mirando de soslayo por última vez a Valeria.
-Acá está el nuevo mundo que te prometí
que te presentaría, espero que lo disfrutes mucho. Es algo tan preciado para
mí. ¡Adelante! Ya pueden pasar.
Abrió la puerta y salió dejando pasar a un grupo de personas, que “estrenarían” a Valeria, siendo esta última arrepentida de todo, recordando lo bueno que había sido su vida y lo tanto que había cambiado, lágrimas amargas caían por sus ojos.
Luciel
QUIEN SEA EL QUE OYÓ, GRACIAS
En
esa época en donde vivir no era alternativa, simplemente era disfrutar de cada
momento y no ser apresurado con las cosas, en un punto de nuestra maravillosa
existencia que lamentablemente se llevó varios en el camino, pero no muchos,
nos acentuaremos en un lugar llamado “La Huerta Perdida”.
20
de mayo 1998, Mientras muchos disfrutaban el verano, con niños risueños sin
preocupación eh aquí brincando de un lugar a otro, con inocencia en su corazón,
los hombres, colaborando entre ellos para la fiesta que se realizará esa tarde.
Las mujeres ya caminaban con trajes de festejo, ya listas para la función, y
todos emocionados por el gran espectáculo. A lo lejos se estacionaba un carro
de gran presencia, era Tomás un muchacho de gran estatura, respetado del barrio
por ser el único en acabar una carrera universitaria y mostrar un gran apoyo en
cada actividad que hubo en el lugar, llego y el ambiente se volvió simplemente
sombrío apagando así, la sonrisa de muchos con lo que tomas mencionó : Me
convertí en el inversionista de un proyecto muy respetado, en este lugar se
tiene pensado en construir departamentos para las personas de prestigio, un
próximo Miraflores, así que ahora todo este acentuamiento humano está a mi
nombre y eso fue lo que he decidido, ustedes viven de invasiones de terrenos y
nadie tiene los papeles en regla, todos serán desalojados de aquí, ahora.
Las mujeres lloraban en desolación, los
hombres llenos de angustia y desesperación querían golpearlo, pero no podían
iba a ser peor, desgraciadamente los niños tan solo unas inocentes criaturas no
tendrían un techo en donde pasar la noche, estaban perdidos y se pasaron lo que
iba a ser una tarde de bailes y celebración se convirtió en el “día de
mudanza”. Tomas por otro lado estaba contento porque sería rico en algunos años
pensando en cuantas personas irían al lugar, tomo sus cosas, y se fue a otro
lugar a celebrar la gran hazaña con sus amigos, llegando a un bar y
amaneciéndose hasta ahí.
Estaba
de camino a casa, vivía un poco alejado y en eso cercano a una casa que parecía
sacada de los sueños de él, estaba de paso. Toco la puerta, más nadie abrió,
tres, cuatro, hasta cinco veces lo intento, pero nada, se dio cuenta de que
había una llave al lado del macetero, dijo: pero que personas tontas en dejar
esto aquí, cualquiera puede entrar, yo, por ejemplo. Llamo en voz alta a
cualquiera que estuviese ahí, pero ninguna alma penaba por ahí, en su paso se
metía cosas que él consideraba de gran valor (relojes, anillos, pulseras) hasta
que fue a una de las habitaciones que decía NO PATEAR MUY FUERTE, claramente lo
hizo, se encontró con lingotes de oro acomodados en orden, eran pilas de pilas
de lingotes y dinero en efectivo, pues que hizo nuestro gran amigo, comenzó a
agarrar uno por uno, lleno de alegría como si el mundo jamás acabaría, en un
mal paso los lingotes cayeron hacia el aplastándolo. Estuvo inconsciente hasta
que una abuelita amablemente lo ayudo a incorporarse, curo sus heridas y le
dijo que, porque se metió a este lugar si nadie venía por aquí, ella era la
única que sabía de este lugar, puesto a que no es una casa como el menciona, es
una cueva y lo que tiene en sus bolsillos, no es dinero ni oro, es papel y
piedras. No tiene nada aquí, pero para salir de esto tienes que dar algo a
cambio por tu crematomanía, ósea tu obsesión por ser rico de varias formas e
incrementar tu riqueza. El lugar era espeluznante, alrededor suyo
había ropas humanas y animales muertos, y no me refiero a tan solo arañitas y
cucarachas, la cara de la abuelita cambio a una escalofriante. El hombre muerto
de miedo acepto le dio lo que quiso y a cambio salió y fue corriendo a su casa,
está realmente fuera de si, les contó a todos los ya desalojados, pero lo
tomaron de loco. Nadie creyó su palabra, es más querían denunciarlo por estar
gritando de tan mañana sin razón justificada, el lloraba de impotencia porque
nadie lo creía, una niña le creyó y le dijo que le mostrara el lugar donde
según estaba lleno de riqueza, pero al llegar no había nada. En esa noche, lo
niños enojados y llenos de resentimiento comenzaron a lanzar piedras y
patearlas por enojo, y gritaron: No sé quién oiga esto, pero si eres justo,
venga nuestro hecho ocurrido, no somos culpables de la codicia de ese hombre,
que sea asustado o castigado. Pues ya se sabe que no cualquiera
respondió por los niños.
El
alegaba decir: era una abuelita, pero cuando se convertía su silueta era
demasiado espeluznante, mi vida, mi alma pidió a cambio y también que me fuera
del lugar, no quiero morir e irme al infierno, no eso no quiero. Perdónenme
todos por favor, ¿sí?
Nadie
quería saber de él, lo odiaban con la furia de sus corazones, nadie le abrió
las puertas de su casa, ni alimento le pasaron, todo esto lo conllevo en
matarse en su casa, nadie sabe cómo porque ni los médicos encontraron nada en
el simplemente fue “muerte natural” eso afirmaban, todos estaban felices, pero
nadie lo demostraba, ya que eso podría ser sospechoso para la policía, y lo
único que querían era ser felices con lo poco y sin nada de riquezas,
simplemente teniéndose entre ellos mismos, ayuda mutua, y cariño devoto.
Tomas
recordado como el peor vecino, avaro de lo que fue en su momento el más querido
por “ayudar” pero esa ayuda se convirtió en traición ya que el al apoya se encargaba
de que los vecinos no sospecharan de él y además lo que nutría su ego era la
gran admiración que tenían de él, incluso varios niños querían ser como el de
grande. Pero el opto por la incrementación de su poder e ingreso capital sin
importarle los sentimientos de las personas, el miedo de las madres a que les
pasasen algo a sus hijos, puesto que ese lugar era conocido como uno de donde
la violencia criminal era en un gran número. Él no fue enterrando en ningún
lugar, como no se tenía información de él, ni sin parientes que le den un
entierro digno, los vecinos botaron su cuerpo al rio sin más remordimiento,
pues a que el sufrieron y ellos decidieron hacer lo mismo con su cuerpo, y
sobre su alma, ya todos sabemos dónde está. Creo que no hay hombre más odiado
que este en donde paso de ser un hijo más de la familia de muchos a ser
comidilla de gallinazos, en esa noche se escuchó su grito, y jamás se volvió a
saber más de él. Cuando fueron a sacar sus cosas encontraron una carta, que
estaba con algunas marcas de una sustancia desconocida, en esa carta que la
niña que le creyó en su momento sobre el dinero que había, ella fue quien la
agarro y decía : es lamentablemente mi suceso, lo entiendo, entiendo todo lo
mal que hice, más mi corazón fueron codiciosos porque yo no quería volver a la
mediocridad de antes, simplemente quería ser alguien, es una pena que hable tan
bien y que haga esto, pero la persona que tome esta carta se convertirá en mi
versión, con la misma codicia que tenía, más será más inteligente y astuto, no
te asustes si lee esto, simplemente intenta sobrevivir...adiós! . La niña quedo
estupefacta, ¿cómo sabía eso?, literalmente ella se lo tomó a pecho, tan solo
tenía 10 años y lo entendió todo, lo único que no entendía era el odio que le
tenían, pero si miraba felicidad en los ojos de los vecinos, era algo psicópata
de la parte de ellos, hasta daba un poco de miedo.
Se sabe que ellos no fueron quienes lo mataron, ¿pero celebrar por alguien muerto que odiaron por ciertos días? hasta duele un poco, puede que él se ganó todo eso a punta de avaricia, pero también fue un humano erróneo, no es justificación para sus actos sin corazón, porque si al menos se hubiese dado el tiempo de hablar con ellos sobre el tema y debatir en qué se podría hacer, ya sea que el pagué sus estadías por los años vividos. En teoría en esta hipótesis, las respuestas para todo esto, son realmente cortas y con un sin fin de solución.
THE ORANGES
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